Ir al contenido principal

Dolor

Dolor. Correr duele. Si corres o has corrido alguna vez sabes que lo normal es que te duela algo todos los días. Luego hay épocas. Épocas en las que te duele el gemelo, otras en las que te duele la rodilla o tienes molestias en la tibia. Luego hay el dolor que la propia vida trae, el dolor de la pérdida de un ser querido, el dolor de una enfermedad, el dolor de una desgracia. Para eso correr te ayuda a seguir adelante, a continuar con el día a día. En esos momentos tu mente se centra en el dolor de tu cuerpo y no en el de tu alma. Y sigues adelante, un km tras otro, hasta terminar extenuado. Entonces la cabeza deja de pensar y el alma empieza a cicatrizarse.
Descansa en paz papá. Nunca te olvidaré.

Comentarios

  1. Tienes razón, Jesús. Es cierto que hay dolores difíciles de asumir. Son aquellos que salen del alma, los causados por la pérdida de un ser tan allegado como pueda ser un padre. Y cuando es en estos extraños tiempos, mucho peor. Lo siento mucho, sólo se me ocurre darte ánimos. Siempre estará en tu recuerdo. Un fuerte abrazo. Y sigue corriendo.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

¡Rock and Roll!

    Hubo noches en las que escuchabas a Kurt Cobain mientras bebias cerveza y fumabas un cigarrillo tras otro. Al grito de "¡Nirvaaanaaaa!" entrabas en un trance hipnótico del que era imposible salir. Eran las noches en las que creías morir, pero no lo hiciste, porque eras joven e inmortal.  Ese sentimiento ya pasó.  Treinta años más tarde, cuando tú corazón se pone a 180 pulsaciones por minuto en los metros finales de una carrera, la sensación de morir un poco, lentamente y de resurgir al cruzar el arco de meta, es muy parecida. Enganchados al Rock. Al Rock de la Media Maratón de este pasado domingo 27 de Abril. Después de más de dos años conseguí bajar de las 2 horas en los 21K, logrando mi tercer mejor tiempo en la distancia. Y lo celebré, claro que lo celebré, con dos tercios de Mahou en buena compañía. Porque, como dijo Jimbo, "el futuro es incierto y el final siempre anda cerca".

Balboa

 En Enero llegan los días de frío, las noches de correr a cero grados o menos. Da más pereza salir a entrenar. Pero cuando salgo siento una gran sensación de libertad, las calles están vacías, sólo hay alguna persona que pasea a su perro, y coches y autobuses de la EMT. Yo llevo guantes y gorro y mi sombra se proyecta en el suelo gracias a la luz de las farolas, el vaho sale de mi boca mientras respiro. Pienso en Rocky Balboa saliendo a correr de madrugada, imagino que corro como el potro italiano cuando se prepara para un combate, a veces hasta lanzo algún golpe ficticio al aire. Recuerdo la frase de Rocky, sentado en la cama junto a Adrianne, la noche anterior al gran combate: ”No le puedo ganar, Adrianne. Pero si tan solo pudiese aguantar los 12 asaltos sabría que no fui un Don Nadie" Si tan solo pudiese aguantar los 42 km y 195 metros...

Ahora

 Ahora que las voces se apagan  Ahora que los ojos se cierran  Ahora que la respiración se calma  Recordarás los días pasados  Aquellos en los que corrías  Quizás huyendo de algo  Noche y día  Mañana buscarás la sonrisa  En los ojos de tus hijos  Los besos  En los labios de tu amor Un año más habrá pasado  Y un nuevo tiempo comenzará.